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Mostrando las entradas de junio, 2019

A usted, señora.

Por Márgarus Margarum A usted,  señora La venero con toda la elegancia de sus prendas, que  en  juego  con  sus accesorios la hacen  lucir hermosa y distinguida cual  magnificencia de una emperatriz. Yo, jovial enamorado, declararé  frente a la corte de moralistas y envidiosos que no hay flor alguna que se compare a lo excelso de  su belleza cuando usted está  desnuda. Porque las rosas y las demás  flores son pétalos de un día, y  usted, señora será siempre una  manifestación sublime de lo bello, aquello que mis manos torpes y toscas han acariciado, y que a mi cuerpo mortal y a mi  alma pecadora le ha dado regocijo.

Matinal. Por Nereyda Flores.

Hoy me di cuenta de que no somos el uno para el otro. Cómo no me di cuenta, debí saberlo desde que no concordamos en la música, desde que nunca nos hemos puesto de acuerdo con la comida, además de que prefiero los guisos complejos y no la rapidez de dos huevos revueltos, debí saberlo. Siempre he precisado de los besos y vivir de ellos, cómo pude ser tan ciega para permitirme nunca recibirlos, cuando menos, en el acto. Y es que yo sabía que no somos el uno para el otro desde que no hubo caricias veraniegas, desde que no me tomaste de la mano para cruzar la acera y no me miraste a los ojos mientras nuestros cuerpos desnudos yacían sedientos. Yo ya sabía que no debía esperar el vino y las baladas los fines de semana. Con lo bonito que me sale ser amor y ser pasión. Tonta de mí al creer que cocinaríamos juntos al anochecer, tonta de mí, mía es la culpa por aferrarme y seguir aferrándome a la idea tan tonta de poder cambiarlo todo. No somos el uno para el otro, no soy la

¡Feliz día del escritor!

“De todo lo escrito yo amo sólo aquello que alguien escribe con su sangre. Escribe tú con sangre: y te darás cuenta de que la sangre es espíritu”. Friedrich W. Nietzsche ¡Feliz día del escritor! Gracias a todos los que a través de las letras comparten mundos imposibles, fantasías, dolores, amores, recuerdos, locuras, delirios, tristezas, vacíos, sueños, pesadillas y todo lo que se ha dicho, se dice, se dirá y no, con palabras. Compartimos como agradecimiento los siguientes escritos: *Para abrir en una nueva pesataña, dar click en cada título. Lluvia en el parque. Por Galaxia Guerrero   La noche de los tiempos. Por Jules Bandalf   Matinal. Por Nereyda Flores   A usted, señora. Por Margarus Margarum  

Lluvia en el parque

Por Galaxia Guerrero El paraguas que nos protegía de la lluvia tiene los agujeros angustiados por la desesperanza de las mariposas, la calle se ensancha como un ogro con la lengua sucia, nuestras pisadas escapan con los brazos caídos a un parque con las rejas abiertas. Una vieja nos observa desde su rostro inexpresivo, casi invisible. Nosotros estamos sentados uno a lado del otro, sin mirarnos. Cruzamos las piernas y fumamos perdidos en la contemplación de ese rostro que nos mira como anunciando algo. Alguien cierra las rejas del parque y guarda las llaves en su bolsillo izquierdo, perdiéndose bajo la lluvia. Estamos prisioneros pero hace tiempo que dejó de importarnos, mientras tengamos nueces entre los dientes y un agua mágica para regar nuestro pequeño jardín desbocado, entonces, sólo entonces nuestras pisadas levantan los brazos con la falsa alegría de la euforia que lleva en sus alas el dulce vuelo de quien decide salirse de sí mismo. Afuera de la jaula todo es blanca

LA NOCHE DE LOS TIEMPOS

Por Jules Bandalf "Cuando era niño, creía que el tiempo antes de mí no existía. Creía que todos, al igual que yo, éramos nuevos en el mundo; que el tiempo pasado era un cuento que los más viejos conocían, aunque quizás los adolescentes sí fueron niños alguna vez. Era muy difícil concebir que los adultos conocieran del mundo y supieran qué hacer -esto último puede que no estuviera tan equivocado- El tiempo se sentía como salir de una madriguera al pie de una enorme cordillera que impedía viajar hacia atrás. El mundo era solamente la ciudad natal y los lugares a su alrededor; y flotaban en el cielo como islas... cuyas límites nos hacían caer a lo que la iglesia y los adultos llamaban el infierno, tan real y ardiente como solo la imaginación de un niño podría concebirlo. Ahora, esa enorme cordillera no parece infranqueable a esta distancia, pero ni en aquel entonces, y mucho menos ahora, se podría cruzar más allá de ella. De cerca no dejaba ver la magnitud ante el p

De cuentacuentos, poetas y más.

"Las luces están dispuestas para iluminarnos desde el pasado".  Malcom Lowry, escritor, poeta y novelista inglés. Recordar es una forma de tener presente a alguien, algo. Recordar es también enriquecer la memoria y los sentimientos. En Soy mequetrefe, agradecemos y recordamos a las amistades que no han compartido su tiempo y sus expresiones. Por eso presentamos una lista de publicaciones que recomendamos para los que no las conocen y para los que conociéndolas, revivan lo cada una tiene para compartirnos. Gracias a todos lo que siguen iluminando el mundo. Recomendaciones: *Click en título de la publicación para que se abra en una nueva pestaña Calambre de Yeso. De la narración oral a los cuentos antropológicos.   Voy a tomar mi lápiz y dibujaré. Por José Juan López Palacios   La línea entre lo sagrado y lo real. Por C. Astro.   El retorno del mequetrefe y sus nubes de burdel.    

Expresiones de amigos. Contenido del blog Soy mequetrefe.

 Por Moisés Cabo Leyva “Lo difícil no es estar con los amigos cuando tienen razón, sino cuando se equivocan”.  André Malraux Y vaya que es difícil estar conmigo cuando tengo razón y más cuando no la tengo, por eso y más, quiero mucho a mis amistades.  Por ellas, por nosotros, escribo estas palabras en agradecimiento, a su amistad que se mantiene y enriquece entre más crece y se comparte . Gracias. Por ustedes este blog se renueva con contenidos que  hablan de nosotros, personas comunes y corrientes que a través de distintas formas expresamos quiénes somos y qué hacemos con amor, pasión y dedicación.  Contenidos humanos que motivan, inspiran y dan sentido y significado a nuestras vidas,  para ser más que testigos y cómplices del deterioro ambiental y humano que  estamos vivimos personal y socialmente, aquí, en un presente y espacio complejo, concreto y digital que nos condiciona y que transformamos recíprocamente. Por eso apelamos a la