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Mostrando las entradas de octubre, 2014

Crápula

Por Moisés Cabo Ya era un profesionista con trabajo seguro vil oficinista burócrata puro.  Egresado de la facultad comiendo en Vips y comprando en Sams. Ya con casa ya con auto, esposa e hijo, dinero en el banco. Vistiendo fino, aseado, adepto al vino, trasnochado. Amante de las amantes, entregado a sus propios vicios. Altivo. Hedonista. Hipócrita. Lambiscón. Culebra. Disoluto. Crápula.

Fiado

Por S. Calavera Otra noche en Xalapa. En la habitación del fondo de la cuartería han pasado la mayor parte del día emborrachándose Roberto, Rodrigo y Rodolfo. Comenzaron bebiendo cerveza y ahora toman caña. Fuman. Hablan. —A mí ya me está dando hambre. — Dice Rodolfo. —Sí, a mí también. — Agrega Rodrigo. —¡Vale verga! El pedo es que no tenemos varo.— Responde Roberto. —Hay que pensar qué hacer… Igual vamos con el francés a pedirle unos baguettes. —¿Cuál francés? —Aquí derecho, a la altura de la escuela. —¿Y apoco te fía?- Preguntan a Roberto los otros dos. —¡Sííí! ¡Ahorita! A ver qué le decimos, yo ya lo he cotorreado… —¿Entonces tú lo conoces? —Ajá. —¡Pues vamos! Y salen a la calle, la Manuel Hernández. Caminan cuatro cuadras en dirección a la unidad de humanidades. Llegan al negocio del francés; vende baguettes y crepas y refrescos en un local no muy grande. Entran. El francés está al fondo. —Vas. — Le dicen a Roberto en voz baja. Se dirige al fondo. Habla con él m

La isla de la desilusión

Por Moisés Cabo Camino descalzo por la isla de la desilusión, cerca del mar todo es licor, mar y alcohol son uno solo, camino descalzo, bebiendo de este coco con piquete. Y la arena se vuelve piedra y camino descalzo sobre la calle, sobre una avenida olvidada, lejana, sin tiempo, gris. El alcohol controla mi cerebro, las vacas se reflejan en las lunas que crecen sobre el pasto, camino descalzo por el infierno d e mi mente, camino y bebo, la playa está hecha de piedras, incluso hay banquetas con perros muertos que apestan aún más esta isla. El alcohol es lo único que reconforta en estas situaciones, bebo mientras camino descalzo por la arena-rocosa de la playa-avenida-pasto, y las aves del cielo vuelan borrachas de mi alegría, giran en el aire como sosteniendo alguna parte del universo, con sus alas abiertas, con el aire que respiro mientras fumo del cigarro que nadie me regaló.

Teclado chino

Por Armando Madrazo Contreras Para un intento de poeta o de escritor, un teclado chino es de gran ayuda, en él es posible derramar la furia de los dedos huesudos cubiertos de esa morena piel, o del color de piel que sea, en cualquier caso, el teclado no es racista, no discrimina, simplemente recibe la fuerza que se ejerce sobre él y transporta a la pantalla las letras que uno ni siquiera había imaginado podrían reunirse en una oración o más. Y es que a veces las palabras surgen tan rápido, o no surgen, pero las sensaciones buscan expresarse a través de letras que puedan llegar a unos ojos u oídos dispuestos a re-significarlas, a disfrutarlas, a hacerlas suyas compartiéndolas una y otra vez. Por eso un teclado chino cobra importancia, pues en él, las manos pueden moverse como si fueran libres y hacer un texto digno de ser reprobado por los poetas que mugen, o por los escritores del sistema, esos que son la medida de todas las cosas. ¡Ah, la delicia de escribir! En algunos