Por Armando Madrazo Contreras
El viento se estremecía, la fría noche acariciaba aún debajo de las cobijas, y afuera, disparos. El Estado Mexicano imponiendo el orden a balazos.
Era algo nuevo en la colonia.
Terror de boca en boca como estirando las palabras.
La ciudadanía sufriendo por causa del gobierno y su mala administración.
Los funcionarios públicos yacían seguros en sus casas.
Desde entonces en la ciudad de Jalapa la gente empezaba a murmurar con miedo, enojo, y tristeza...