Por Pantera Nocturna A: A. M. M. Definitivamente ella lo amaba, por eso quería estar presente cuando él se iba a dormir y así poder ver como poco a poco él cerraba los ojos y la cara que le mostraba en la vigilia se convertía en la que en realidad era, sin poses ni disimulaciones. De modo que ya no se trataba del amor aparente o la falta de compañía, pues se hubiese cambiado el nombre, la edad y hasta el domicilio con tal de que aquel hombre estuviera cerca de ella. Pero sobre todo esto, hubiese preferido la muerte antes de que aquellas nalgas no estuviesen instaladas, por las mañanas, entre sus manos. Definitivamente ella lo amaba. Imagen de Guido Crepax